Cuentan que hace tiempos, dos jóvenes que volvÃan de un velorio en el centro de San Juan Ermita, Chiquimula tenÃan que pasa por el parque, pero ya siendo medianoche.
Uno de los muchachos noto que habÃa un hombre con camisa negra y pantalón azul, en el parque, fumando un cigarro.
Uno de los jóvenes se les acerco para pedirle la hora, pero al voltear el rostro del hombre, notaron que era una calavera.
A toda prisa, los muchachos salieron despavoridos para sus casas, mientras a lo lejos se escucha una cargada macabra, en aquella noche del Dia de Todos los Difuntos.